5 puntos para entender por qué las obras sociales siguen cobrando pero las clínicas no pueden cubrir sus gastos.

La cuarentena enfrenta a las clínicas con una caída significativa en sus ingresos que podría repercutir la incapacidad de comprar insumos necesarios o hasta de pagar salarios a tiempo. Muchos se preguntan cómo puede ser que las clínicas enfrenten estas dificultades si la gente sigue pagando su prepaga u obra social. Te lo explicamos.
El éxito inicial en la lucha contra el avance de la pandemia comenzó a encontrarse con piedras en el camino. La cuarentena, si bien es la fórmula en la que todo el campo científico coincide que funciona para evitar el contagio, trae consigo sus efectos colaterales dañinos. Muchas de sus consecuencias económicas son conocidas, pero una de ellas es de suma importancia para el mantenimiento del sector de la salud y no ha gozado de tanta difusión.
Se trata de la supervivencia económica de los centros de salud privados: las clínicas y hospitales que dependen de su facturación diaria para funcionar. El gobierno cuenta con que las clínicas privadas hagan su parte para poder contener a los pacientes de Covid-19 cuando la propagación del virus llegue a su pico, pero ¿qué pasa si las clínicas no pueden resolver su situación financiera?
Te lo explicamos en 5 pasos:
- Más de 2/3 de los argentinos se atienden en el sistema de salud privado, sea a través de prepagas u obras sociales.
- Las clínicas chicas y medianas dependen de lo que recaudan en atención de tipo cotidiana: análisis, consultas médicas de todo tipo, etc. Si uno va a la clínica a una consulta médica, será la obra social o prepaga, a la cual uno le paga de forma mensual, la que cubra esa consulta pagándole a la clínica.
- La cuarentena obligatoria frenó drásticamente este tipo de actividad médica. Se estima que las guardias, en vez de tener 100 pacientes por día, ahora tienen solo 5.
- Dado que este tipo de actividad representa cerca de la mitad de la facturación de las clínicas privadas, su ausencia pone en riesgo financiero a las clínicas: podrían tener dificultades para pagar insumos médicos y, eventualmente, inclusive salarios.
- Entre el progresivo contagio de los medicos que lleva al cierre de centros de salud, y la posibilidad de que otros centros vayan a quiebra por motivos financieros, podrían faltar la cantidad de clínicas y hospitales necesarias para cuando lleguemos al pico de contagio de Covid-19.
Entre la creciente falta de personal médico, y las dificultades financieras de los centros de salud, parece que corremos riesgo de acercarnos a una crisis de los servicios de salud privados que podrían complicar el esfuerzo nacional contra el Coronavirus. Algunos analistas sugieren que el gobierno debería tomar medidas para sostener económicamente a estas clínicas si quiere garantizar su funcionamiento para cuando llegue el pico de contagio.